El efectivo va desapareciendo, ( será por bien o por mal) y cada vez más personas se encuentran bancarizadas ( bueno…. ya casi todos)…, y con alguna tarjeta en su cartera. Pero a veces, al sacar la cartera para pagar por algo, puede que se haga la pregunta de con qué tarjeta es mejor pagar. ¿preparados para ver, algunas situaciones en las que conviene utilizar tarjeta de crédito o débito?
Tarjeta de Débito:
La tarjeta de débito es una forma sencilla de pagar con el dinero que hay actualmente disponible en una cuenta corriente o caja de ahorro, evitando la necesidad de contar con efectivo. Hace más sencillo el pago de las compras, y evita tener que llevar efectivo a todos lados. ¿Para qué situaciones es ideal? :-0
1. Ir pagando compras chicas
La realidad es que si tiene efectivo disponible, no vale la pena utilizar el crédito. Pague sus compras, y olvídese de ellas. Pagar compras pequeñas con una tarjeta de crédito genera el riesgo de que pierda la noción de que muchas compras insignificantes deriven en una gran deuda, y termine con dificultades para cubrirla.
En la medida de lo posible, lo mejor es dejar el crédito para cuestiones más puntuales y con importes más grandes. De este manera se puede mantener más control sobre el mismo.
2. Límite de acceso al crédito comprometido
A su vez, puede que usted ya tenga el límite de débito de su tarjeta a tope y sacando chispas . Si sabe que va a alcanzar el límite , deje de utilizar su tarjeta de inmediato. Incluso si está en duda de si el límite será o no suficiente.
Si necesita echar mano del crédito, siempre debe saber que debe utilizarlo para algo que realmente sea importante, y no caprichoso.
A veces el crédito de las tarjetas, puede ser beneficioso por su rapidez, y en esos casos prima ser consciente del fin con el que se está utilizando. [Tweet «Las tarjetas de crédito son un arma de doble filo «]
Ver: Cómo convertir una tarjeta de crédito excedida en un préstamo personal
3. Compras en el exterior
Cuando viaje al exterior, seguramente no sea de las personas que lleva grandes cantidades en efectivo. Primero porque hacerlo es muy inseguro y, segundo, porque es muy incómodo. Entonces, opta por utilizar una tarjeta pero … ¿cuál es mejor? Lo cierto es que es difícil una única respuesta, porque las cifras y tasas cambian según el país. Sin embargo, por lo general, utilizar la de débito es mejor opción, ya que implica menos tasas y cobros.
4. Control de sus finanzas
La tarjeta de débito también es una muy buena opción si es que no confía en su control de gastos.
La tarjeta de crédito nos da la posibilidad de gastar dinero que aún no disponemos, y eso puede darnos una falsa perspectiva de la realidad.
Si tiene dudas en su criterio en cuanto a gastos, es más recomendable que se limite a la tarjeta de débito, y que intente utilizar el dinero que ya dispone. Muchas personas con problemas para controlar sus finanzas comienzan a hacer un uso indiscriminado de la tarjeta de crédito, lo que deriva en una bola de nieve de deudas, que termina por destruir las finanzas de la persona. ( casi el 90% de nuestras consultas son acerca de este tema).
Tarjeta de Crédito:
Si confía mucho en su juicio a la hora de gastar dinero, y en ocasiones quiere gastar o invertir dinero, con la certeza de que lo va a pagar luego, la tarjeta de crédito es una buena opción. Pero es muy importante que esté completamente seguro de que va a ser capaz de afrontar dicha deuda. ( si no es así, olvídese de usarlas)
a. Pagar imprevistos
En ocasiones, puede surgir un imprevisto urgente, por el que no quede más remedio que invertir algo de dinero.
A veces el presupuesto está muy ajustado, y no hay disponible para afrontar dichas urgencias. Por tanto, no queda más remedio que recurrir a la tarjeta de crédito, de modo de adelantar un dinero.
Procure que el acceso a deuda sea lo mínimo necesario. Si necesita financiar ese crédito en más pagos con intereses, haga todo lo posible para cubrir la deuda cuanto antes, así evitará tener que afrontar intereses altísimos.
Ver: Tarjetas de crédito: Ventajas y desventajas
b. Compras de uso futuro
Los billetes de avión, tickets para conciertos o inscripción a eventos: suelen ser abonados meses antes de ser usados. Esto implica un mayor riesgo de que las circunstancias le lleven a que quiera cancelar la compra. Si bien como norma general la devolución de una compra depende en buena parte de la empresa vendedora, por ello debe informarse de las condiciones de devolución de las compras de dichos servicios. ( casi nadie lo hace, y luego, ya sabe… vienen las decepciones)
c. Programas de puntos
Las tarjetas de crédito suelen contar con programas de beneficios y acumulación de puntos que derivan en más beneficios y premios. Ante las mismas condiciones, y suponiendo que va a cubrir la deuda que acumule en su tarjeta, la de crédito le aporta ese extra. ( nunca se deja llevar por ese afán, sin conocer las condiciones de su tarjeta)
d. Compras por internet
En la actualidad, a la hora de comprar por internet, muchos sitios ofrecen la posibilidad de utilizar una tarjeta de débito como de crédito. La de débito implica hacer un pago directo a la empresa vendedora. La de crédito, en cambio, tiene “un paso intermedio” que es la propia empresa emisora de la tarjeta. Esto brinda más seguridad a la hora de comprar –en especial- a través de internet.
Según la normativa, todo pago por internet puede ser retrocedido si usted no está conforme, y en ese campo tan amplio, me reservo para explicarle cómo hacerlo en breve en un próximo post, a no ser que usted quiera la información de inmediato, ya que de solicitarla me brindo a adelantársela. ( para algo están los amigos no?
Ver: 5 consejos para administrar mejor sus deudas
Así que ya sabe, cuando haga alguna compra, piense qué tarjeta le conviene utilizar. ¿Se le ocurre alguna ocasión más en la que sea mejor alguna de las tarjetas? Déjenos saber en los comentarios.
ah!!!!!! y cuidadín con los gastos, que luego vienen las lamentaciones chicos!!!!