Existen muchas maneras de comunicarnos y es importante saber exactamente cómo debemos hacerlo, para que nuestro interlocutor se sienta cómodo con lo que le decimos, y podamos conseguir una buena comunicación efectiva, y real.
Existen numerosos libros, y miles de consejos a cerca de la comunicación efectiva, y hoy voy a compartir un ejemplo de mala praxis con una de las frases más utilizadas por la mayoría de las personas.
La comunicación es un don nato que tenemos todas las personas, sin embargo, es lo más difícil de implementar. Dependerá de cómo nos comuniquemos para poder o no conseguir el resultado que esperamos de cualquier conversación.
Se trata de saber si la persona con la que estamos conversando va siguiendo el hilo de nuestra idea, o de nuestra conversación.
hay dos opciones para realizar la pregunta;
En primer lugar tenemos la opción
- ¿me entiendes?
- ¿entiendes lo que te digo?
- ¿comprendes?
Formular la pregunta de estas maneras, puede resultar molesto para nuestro interlocutor, ya que éste entenderá como si le estuviéramos diciendo que es incapaz de comprender, y que es un poco cortito.
Lo peor, de lo peor, es cuando se adoptan estas preguntas como muletillas constantes, pues de molesto se puede convertir en irritable para nuestro interlocutor.
y en segundo lugar tenemos la opción
- ¿me he explicado bien?
- ¿me explico?
- ¿estoy consiguiendo explicarme bien?
Al formular de esta manera la pregunta, que para nosotros significará lo mismo que en la primera opción, nuestro interlocutor se mostrará más abierto a escuchar, pues de esta manera nos «autoacusarnos» de que quizás seamos nosotros los que al tratar de comunicarnos tengamos alguna carencia en saber explicarnos correctamente.
La forma en la que nos comunicamos, puede llevarnos al éxito, o bien alejarnos de él. le recomiendo analizar cómo son sus expresiones y la riqueza de su vocabulario, para conseguir una comunicación efectiva excelente.
Uno de los mejores libros para aprender técnicas de comunicación eficaz es el camino fácil y rápido para hablar eficazmente, de Dale Carnegie, uno de los grandes en la comprensión, que nunca va a dejar de ayudarle y sorprenderle.
Piénselo y pruebe de cambiar las expresiones que le he compartido, y compártanos el resultado de su investigación.
¿me he explicado correctamente? 🙂